En un trágico suceso ocurrido en Cala Bona, Mallorca, el yate "La Luna" embistió un pequeño bote, resultando en la muerte del joven Guillem Comamala, de 20 años. 

Este incidente no fue aislado, ya que minutos antes, la misma embarcación había acosado a otra lancha con dos menores a bordo. El yate, de unos veinte metros, se acercó a los pequeños asustándolos, de manera que el padre solo pudo observar desde la distancia atemorizado.

Así, el padre se acercó a los tripulantes de "La Luna" para recriminarles su comportamiento, a lo que respondieron con respuestas erráticas y evasivas. La Guardia Civil investiga estos eventos para esclarecer el comportamiento de la tripulación antes de la tragedia.

Lo único que falta por averiguar quién iba al timón en el momento de la tragedia y quiénes estaban en el yate cuando ocurrió.